Viernes y Sábado sin mafaldas

Viernes.-Llegó mi amigo que vive en el mar. Me trajo un collar de conchas, amarrado a uno de trapo descosido y manchado. "no te gusta el de concha" me dijo, se lo llevó me dejó el suyo. Tomamos cerveza oscura toda la tarde, fumamos porro arriba de un cerro, medité adentro de mi carrito y vimos la luna cerca, haciendo las manos tubito sobre los ojos, tirados en un parque de esas colonias que nomás tienen parque en esta ciudad tan mezquina, luego me acosté en una banca llena de pulgas.

Sábado.-Mi carrito comía kilómetros mientras corretéabamos al sol hasta que oscureció. Los foquitos en el desierto me recuerdan una peli de Wenders que me hace sentir lo extraño confortable. Cené ensalada, planché mi ropa neutra arrugada y me puse un saco plateado para salir. Trabajo y trabajo hasta las 3 del domingo, los otros también. Luego vamos a ver al chófer de "Sister Cities" que se quebró el brazo tratando de limpiar los vidrios del bus. Se inquieta cuando nos ve llegar, cree que le reprochamos ser viejo y haberse trepado a una escalera. Todo sea por tener un museo de paredes blancas con un laberinto pápago en el patio.

Domingo.-Vi el blog tan solito...que me animé a contarles esto

2 comentarios:

  mar adentro

19 de octubre de 2008, 19:57

gracias por compartirlo

  Anónimo

20 de octubre de 2008, 12:21

Para que no se atropellen las palabras cuando nos veamos otra vez

Besos